En serio, a veces cuando tu día pinta para una excelente jornada de trabajo (cosa rara), siempre hay alguien dispuesto a cagarla y agüitarte.
Pero hay días, como hoy, en que no es así... Es peor. Te levantas bien chingón. Tarde pero chingón. Te bañas con agua helada porque no hubo tiempo de calentarla, te tomas un café instantáneo, te llevas el mp3 con la batería bien cargada, lo pones en reproducción aleatoria y durante los casi 60 minutos de trayecto te van tocando puras rolas chingonas o al menos de tu agrado.
Pero unos minutos antes de llegar al trabajo te das cuenta de que a alguien no sólo se le ocurrió cagarla. La cagó, la pisó, la embarró y para acabarla de chingar, te salpicó.
Puta madre, odio los días malos...
Pero ¡¡¡Reputísima madre!!! ¡¡¡Odio los viernes malos!!!
No entraré en detalles...
2 comentarios:
bueno, piensas que una "enfermera" no escribiría como yo por que en tu mente hay un estereotipo bien marcado de lo que debe "ser" una "enfermera". Pero los estereotipos me los paso por el culo. Y si, si soy enfermera, y me encanta serlo.
un beso.
Mal viernes, mal inicio de fin de semana, mal fin de semana: pinche semana pendeja esperando el proximo fin...
un beso!
ashhh no fue una replicaaa
fue una aclaracion!! jajaajaj
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